Soltar lastre

En medio del mar con tu barquita, entre dos orillas, el agua y el cielo, el viento y los remos, lastre y decisión... ¿hacia dónde voy?, hay que navegar, hacia algún lugar, si me quedo quieto pensando se forman tifones y me tocan... es hora de soltar lastre, ¿cual de ellos?, ¿hay lastres malos y lastres buenos?

En el fondo del mar esperan mientras la corriente les golpea... Veo que hay algunas personas a las que me he dirigido estos últimos días, antes de que esta imagen sea borrada por un tsunami y una nueva vida empiece con nuevas metas. Entre ellas hay un pez globo con mofletes que hace chof, valentina que ya llegó a casa por navidad, esos dos que se apartan deben tener frio... ellos no me ven, son tan monos desde la superficie del mar, igual desde el cielo se ven más pequeñitos. Creo que les da igual que los deje en medio del mar o que les suba a mi barquita para dirigirnos allá donde digan... hay viajes que son más rapidos con ellos y otros sin ellos, a veces te sujetan y otras no hacen fuerza contra la corriente que me lleva ¿a donde? ¿a alguna o ninguna parte? ¿al cielo al infierno o a la tierra? ¿al todo o la nada? Demasiadas preguntas para llegar a lo obvio... ya lo dicen muchos filósofos. Pero esta perversión me enciende y me enferma con tanta fuerza, que me hace seguir perdido en la mar, en la barquita...

Y entonces enchufo el móvil y hablo contigo cuando no estás al otro lado escuchando... hola, ¿que tal? ¿como vas? ¿que haces? ¿donde estás?... acabo y dejo el movil enchufado, pasan 4 días y se acaba la batería, escuché un ring!! pero no era una llamada, ni tan siquiera una perdida, era un pájaro que me decía mira mira como mis compañeros pian. Oscurece, me tapo con lo que puedo, alimento un poco más la llama para el fuego, aún hace más frio, me despido viendo destellos en el cielo, con el sonido del mar, cierro los ojos, en sueños golpeo y grito, a veces incluso llego a mi destino...